El IRNASA-CSIC identifica una prometedora diana para generar vacunas frente a la garrapata ‘Ornithodoros moubata’

  • Se trata de las acuaporinas, unas proteínas que ejercen una función fundamental en la fisiología de las garrapatas
  • El estudio se ha centrado en ‘Ornithodoros moubata’, una especie de garrapata blanda distribuida por África Central, Meridional y Oriental que transmite la Peste Porcina Africana y la Fiebre recurrente humana
  • El equipo del IRNASA-CSIC ha diseñado un conjunto de 12 péptidos inmunogénicos para generar una vacuna capaz de bloquear las acuaporinas de esta garrapata

El Grupo de Investigación de Parasitosis de la ganadería y zoonosis parasitarias del IRNASA-CSIC ha identificado y caracterizado las acuaporinas de la especie Ornithodoros moubata como diana para generar una vacuna frente a esta garrapata, distribuida por África Central, Meridional y Oriental, que causa graves problemas a nivel ganadero y de salud humana. El trabajo se ha publicado en un número especial sobre garrapatas blandas de la prestigiosa revista ‘Pathogens’, del que los investigadores del IRNASA-CSIC Ana Oleaga y Ricardo Pérez Sánchez son editores invitados como referentes internacionales en este ámbito.

Ornithodoros moubata es una garrapata blanda transmisora de la Peste Porcina Africana (PPA), una enfermedad viral grave que afecta a los cerdos domésticos y silvestres y que constituye una seria amenaza para la ganadería porcina; y de la Fiebre recurrente humana (FRH), una enfermedad de etiología bacteriana, hiperendémica en los países de África oriental, como Tanzania, caracterizada por episodios repetitivos de fiebre en las personas y altas tasas de mortalidad perinatal.

Estas garrapatas viven en el interior de las madrigueras de sus hospedadores, que son principalmente los jabalíes verrucosos africanos (facocheros), pero también colonizan las viviendas humanas y los establos y se alimentan sobre las personas y los animales domésticos, principalmente los cerdos, a los que transmiten esas enfermedades.

“La presencia en el medio antrópico o doméstico de estas garrapatas dificulta enormemente la erradicación de la PPA y de la FRH en las zonas endémicas, incrementa el riesgo de reintroducción de la PPA en países de los que se erradicó ya, como España y Portugal, y favorece la endemización y la persistencia en los países que ha invadido más recientemente, como los caucásicos, Rusia, los países de Europa del Este, China o Vietnam, entre otros”, apunta el investigador del IRNASA-CSIC Ricardo Pérez Sánchez, primer autor del trabajo.

En la lucha contra las garrapatas, el método tradicionalmente empleado han sido los acaricidas químicos, pero estos productos presentan numerosos inconvenientes como el desarrollo de resistencias, la contaminación ambiental y su ineficacia frente a esta especie de Ornithodoros.

En este contexto el equipo del IRNASA-CSIC trabaja enfoques alternativos, como son el desarrollo de test diagnósticos y nuevas vacunas frente a estas garrapatas, que permitan localizar sus poblaciones, tenerlas vigiladas y eliminarlas si es posible, facilitando la prevención y el control de las enfermedades que transmiten.

Uno de los métodos alternativos más prometedores es el desarrollo de vacunas. “Estas vacunas están dirigidas a los hospedadores para generar en ellos una respuesta inmunitaria de anticuerpos frente a determinadas proteínas de las garrapatas que realizan funciones importantes. De esta forma, cuando la garrapata se alimenta del hospedador vacunado, junto con la sangre ingiere anticuerpos que neutralizan las funciones de la proteína diana y esto se traduce en daños significativos en la garrapata”, detalla Pérez Sánchez.

Las acuaporinas, unas dianas clave en las garrapatas

El trabajo recientemente publicado se centra en unas proteínas diana concretas, las acuaporinas. Estas proteínas se encargan de transportar agua a través de las membranas biológicas y ejercen un papel fundamental en diversos procesos fisiológicos vitales para la garrapata, incluyendo la alimentación de la misma.

“Cuando las garrapatas se alimentan ingieren cantidades enormes de sangre, hasta 200 veces su peso, que deben concentrar para poder digerir”, explica el investigador del IRNASA-CSIC. En esa concentración las garrapatas eliminan agua e iones y en ese proceso las acuaporinas tienen una función clave. “Las acuaporinas se expresan al menos en tres tejidos: el tubo digestivo, las glándulas salivales y las glándulas coxales, por lo que son dianas idóneas para vacunas, al ser fácilmente accesibles a los anticuerpos que se ingieren con la sangre del hospedador”, agrega.

El equipo del IRNASA-CSIC cuenta con datos del transcriptoma y del proteoma de las glándulas salivales y del intestino de Ornithodoros moubata obtenidos en proyectos previos. A través de data mining o minería de datos, identificaron más de 20 transcritos anotados como acuaporinas y seleccionaron siete que tenían marcos de lectura completos, es decir, que codificaban una acuaporina entera en O. moubata.

Tras amplificar, clonar y verificar por PCR que las secuencias obtenidas eran válidas, realizaron un análisis estructural y molecular con el objetivo de desarrollar modelos tridimensionales para determinar los dominios extracelulares, es decir, las partes de esas proteínas que están expuestas fuera de la célula, ya que es ahí donde los anticuerpos del hospedador pueden llegar más fácilmente.

Además, llevaron a cabo un análisis predictivo de la inmunogenicidad de las acuaporinas –su capacidad para generar respuestas inmunes-, en especial de esas partes extracelulares, y realizaron un análisis filogenético para caracterizar las siete identificadas. “Vimos que se agrupaban en cuatro clados. La homología de secuencia en cada clado era superior al 90 por ciento pero entre clados la homología era significativamente menor”, señala Pérez Sánchez. Todas ellas se expresaban en las glándulas salivales y en el intestino medio y solo tres en las glándulas coxales, unos órganos de excreción específicos de las garrapatas blandas.

Un conjunto de 12 péptidos inmunogénicos

Tras este estudio estructural, tridimensional e inmunogénico el equipo del IRNASA-CSIC concluyó que, para convertir las acuaporinas en dianas vacunales, lo más apropiado era diseñar péptidos inmunogénicos, péptidos capaces de generar anticuerpos específicos. Así, diseñaron un conjunto de 12 péptidos inmunogénicos para bloquear todas las acuaporinas identificadas.

“Si conseguimos boquear la función de todas las acuaporinas a la vez es muy probable que la vacuna ejerza un efecto protector intenso frente a esta garrapata. Si solo bloqueamos una o dos el efecto protector puede que se diluya, porque el resto de las acuaporinas quizás compensen la pérdida de función inducida por la vacuna”, precisa el investigador del IRNASA-CSIC, quien avanza que el próximo paso será un experimento de vacunación en conejos.

“Sinterizaremos estos péptidos y diseñaremos un experimento de vacunación para ver su eficacia real, para comprobar si inducen una respuesta de anticuerpos como hemos visto en el plano teórico. Una vez comprobado pondremos garrapatas en los animales inmunizados para ver el efecto de la vacuna sobre esas garrapatas”, añade.

También realizarán un estudio similar con otra garrapata blanda, Ornithodoros erraticus, sintetizarán nuevos péptidos y determinarán su protección frente a esta garrapata así como la protección cruzada que se pueda generar, lo que podría conducir a una vacuna de más amplio espectro.

Esta investigación ha sido financiada por el proyecto “RTI2018-098297-B-I00” (MCIU/AEI/FEDER, UE), subvencionado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER); así como por el proyecto “Unidad de Excelencia CLU-2019-05-IRNASA/CSIC”, concedido por la Junta de Castilla y León y cofinanciado por la Unión Europea (FEDER “Europa impulsa nuestro crecimiento”).

Referencia:

Pérez-Sánchez, R., Cano-Argüelles, A. L., González-Sánchez, M., & Oleaga, A. (2022). First Data on Ornithodoros moubata Aquaporins: Structural, Phylogenetic and Immunogenic Characterisation as Vaccine Targets. Pathogens11(6), 694. https://doi.org/10.3390/pathogens11060694

El IRNASA-CSIC ha realizado un estudio estructural, tridimensional e inmunogénico de las acuaporinas y ha concluido que, para convertir las acuaporinas en dianas vacunales, lo más apropiado es diseñar péptidos inmunogénicos.

El proyecto europeo LIFE Regenerate busca reavivar la dehesa mediante prácticas de agricultura regenerativa

  • El IRNASA-CSIC acoge la reunión final del proyecto, dotado con más de 2,2 millones de euros
  • Durante cinco años, el proyecto ha tratado de convertir la dehesa en un sistema sostenible desde el punto de vista económico, social y medioambiental

El Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC) acoge hoy la Conferencia Final del proyecto europeo LIFE Regenerate, que ha aplicado diversas técnicas y prácticas enmarcadas en la agricultura regenerativa para transformar la dehesa en un sistema sostenible desde el punto de vista económico, social y medioambiental. Así, durante cinco años, el equipo del proyecto se ha centrado en mejorar la calidad del suelo y la masa forestal, aumentar la biodiversidad, aplicar nuevas prácticas de pastoreo y reutilizar los restos de biomasa que se producen en las explotaciones de dehesa.

El proyecto LIFE Regenerate (Revitalización de sistemas agrosilvopastoriles mediterráneos multifuncionales utilizando prácticas dinámicas y rentables) tiene una dotación total de 2,2 millones de euros de los cuales 1,3 (60%) están financiados por el programa LIFE de la Comisión Europea. La iniciativa, coordinada por la Universidad de Extremadura, cuenta con otros cinco socios: el IRNASA-CSIC, la Universidad de Sassari (Cerdeña, Italia), las empresas IDForest y Volterra y la Fundación Naturaleza y Hombre.

José Luis Hernández Mulas, investigador del proyecto en el IRNASA-CSIC, detalla que la iniciativa aborda la problemática que vive actualmente la dehesa. Estos sistemas agrosilvopastoriles mediterráneos tienen una gran importancia social y económica en el sur de Europa, al fijar población rural y conservar recursos naturales, pero se encuentran en riesgo.

“Hay muchos factores que están influyendo en el decaimiento de la dehesa. Cada vez tenemos dehesas más antiguas y con menos renovación en cuanto a arbolado, con más extensión pero con menos mano de obra, también enfermedades como la seca o plagas como cerambyx que están originando que las explotaciones cada vez sean menos productivas y menos biodiversas”, precisa. A todo ello se suman los factores económicos, como el aumento de precios de los insumos y los costes energéticos, que han agravado la situación.

En este contexto, el proyecto LIFE Regenerate busca transformar el modelo actual de dehesa a través de prácticas de agricultura regenerativa, bajo la premisa de que estas importantes áreas pueden volverse autosuficientes y rentables si se realiza un uso eficiente de los recursos y se incorporan productos de valor añadido.

Para desarrollar este planteamiento, el equipo del proyecto ha puesto en marcha una serie de acciones en dos fincas demostrativas: la Finca Muñovela, propiedad del CSIC y gestionada por el IRNASA; y la Finca Caratzu, una propiedad privada situada en Oristano (Cerdeña, Italia).

En estas dos localizaciones, han ensayado técnicas como el pastoreo adaptativo multiparcela (AMP, por sus siglas en inglés). En la Finca Muñovela el equipo ha establecido pequeñas parcelas por las cuáles los animales van pasando de manera planificada. En cada una de ellas los animales permanecen 2-3 días hasta que son trasladados a la siguiente, evitando el pastoreo excesivo en un mismo área y proporcionando un tiempo de “descanso” al pasto que es clave para su regeneración.

Este tipo de pastoreo presenta diversas ventajas. Se reduce el sobrepastoreo, disminuye la dependencia de insumos externos y aumenta la rentabilidad económica, los suelos se encuentran más saludables –aumenta el almacenamiento de carbono-, mejora la producción de pastos y se suprime la maleza.

Un mayor aprovechamiento del agua

Otra de las acciones ensayadas durante el proyecto ha sido el diseño hidrológico ‘Keyline’ o de Línea Clave, una técnica de tratamiento de suelo que permite un mejor aprovechamiento del agua. Se desarrolló en Australia en los años 50 del siglo pasado y combina la captación y conservación del agua con técnicas de regeneración de la tierra. “Esta técnica se basa, primero, en realizar un diseño del terreno en función de las curvas de nivel. Se pretende elaborar un diseño de tal forma que, al pasar el arado, se tengan en cuenta las curvas de nivel para redistribuir el agua de lluvia que cae en la parcela”, explica el investigador del IRNASA-CSIC, quien añade que requiere un arado especial que ha sido adquirido con cargo al proyecto y que está sirviendo para reproducir la técnica en otras fincas de replicación.

Con esta práctica se reduce la erosión del suelo -el agua llega zonas donde no llegaría de forma natural-, se disminuye el anegamiento, aumenta la retención de agua y también de carbono y se incrementa la fertilidad del suelo, al facilitar a los microorganismos mejores condiciones de humedad, temperatura y flujo de aire sin necesidad de aportar fertilizantes químicos.

Una mejor gestión del arbolado

En cuanto a la gestión del arbolado, también en Muñovela se han realizado inoculaciones de varias especies de micorrizas, hongos del suelo que mejoran la absorción de agua y nutrientes por parte de las raíces, y que además ayudan al árbol a fortalecer sus defensas frente a organismos patógenos. Asimismo, se han regenerado árboles y también plantado nuevos ejemplares de fresno, quejigo, alcornoque, morera y majuelo, con el objetivo de diversificar los recursos forrajeros para el ganado y aumentar al mismo tiempo la biodiversidad.

Otra de las acciones del proyecto LIFE Regenerate se ha centrado en valorizar los restos de poda dentro de las explotaciones, lo que contribuye a reducir el aporte externo de forraje y crear fuentes alternativas de ingresos, por ejemplo, inoculando troncos con seta shiitake para obtener una producción comercial o generando biochar.

Finalmente, se han replicado las mejores prácticas en 20 fincas con más de 5.000 hectáreas en España, Italia y Portugal para demostrar que los modelos son efectivos.

Aunque el proyecto finaliza este mes de junio, el equipo iniciará posteriormente la fase ‘after-LIFE’, en la que seguirán avanzando en algunas líneas durante otros tres años.

El equipo del IRNASA-CSIC participante en el proyecto está compuesto por Ignacio Santa Regina, como investigador principal (IP), Álvaro Peix, Mariano Igual y el equipo de la Finca Muñovela, encabezado por Raquel Arroyo y José Luis Hernández Mulas.

Los profesionales del IRNASA-CSIC presentan más de una veintena de proyectos en desarrollo durante las I Jornadas de Excelencia Investigadora

Los días 15 y 16 de junio el Salón de Actos del IRNASA-CSIC acogió la celebración de las I Jornadas de Excelencia Investigadora, un foro de encuentro entre los profesionales del centro y puesta en común de los diferentes servicios científico-técnicos y proyectos en desarrollo actualmente.

En total, los profesionales del IRNASA-CSIC presentaron 22 proyectos y convenios en vigor sobre desarrollo sostenible de sistemas agroforestales y ganaderos, estrés abiótico, y procesos de degradación del medio ambiente y su recuperación; así como nueve servicios científico-técnicos (confocal, finca Muñovela, invernaderos y fitotrón, análisis e instrumentación, biblioteca, animalario y biología molecular), dos de ellos incipientes (colecciones y bioinformática y edición genética), que prestan servicio tanto a usuarios del propio centro como a usuarios externos (OPIs, universidades, empresas privadas, etc.).

La iniciativa, promovida por la Unidad de Excelencia del IRNASA-CSIC, tuvo como objetivo fomentar un mayor conocimiento entre los grupos de investigación del Instituto, mostrar su singularidad científica y técnica y promover el networking y la puesta en marcha de nuevas líneas de investigación y proyectos conjuntos.

En este sentido, la actividad contó con el apoyo del Instituto para la Competitividad Empresarial de Castilla y León (ICE) y la presencia de Elena Martín Espino, quien disertó con los asistentes sobre las oportunidades de financiación europeas de proyectos de I+D.

Las I Jornadas de Excelencia Investigadora se han organizado en el marco del proyecto “CLU-2019-05 Unidad de Excelencia IRNASA-CSIC”, financiado por la Junta de Castilla y León y cofinanciado por la Unión Europea (FEDER “Europa impulsa nuestro crecimiento”).

Logos de la Junta de Castilla y León y FEDER "Europa impulsa nuestro crecimiento"

Un proyecto nacional busca soluciones innovadoras para controlar enfermedades de las plantas

  • El IRNASA-CSIC forma parte del consorcio del proyecto SUPERA, que aplicará una nueva tecnología llamada ARN de interferencia para “apagar” genes específicos de microorganismos patógenos que causan graves daños en cultivos y bosques
  • La iniciativa cuenta con la financiación del Ministerio de Ciencia e Innovación (MCIN) y la Unión Europea a través de fondos Next Generation

Investigadores del Grupo de Interacción Planta-Microorganismo del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC) trabajan en un proyecto nacional que busca soluciones innovadoras para controlar enfermedades de las plantas, en concreto, aquellas causadas por hongos y otro tipo de microorganismos denominados oomicetos.

El proyecto, financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación (MCIN) y por la Unión Europea a través de los fondos Next Generation, está coordinado por Julio Javier Diez Casero, catedrático de la Universidad de Valladolid (UVa) en el Campus de Palencia, y cuenta con la participación de otras dos entidades, el centro tecnológico CARTIF y la empresa Idai Nature.

La base del proyecto es la utilización de una nueva tecnología llamada ARN de interferencia (RNAi), la cual permite “apagar” genes específicos mediante el empleo de pequeñas moléculas de doble cadena de ARN (dsRNA, por sus siglas en inglés). El objetivo es bloquear la expresión de algunos genes clave en los microorganismos patógenos para evitar que estos dañen a la planta.

En concreto, el proyecto se va a centrar en dos patógenos, el hongo Fusarium sp. y el oomiceto Phytophthora sp. El género Fusarium engloba a un grupo de hongos oportunistas ampliamente distribuidos en suelo y plantas, capaces de perjudicar gravemente a muchos tipos de cultivos, desde cereales a hortalizas, lo que produce pérdidas económicas importantes en la agricultura. Lo mismo sucede con Phytophthora, cuyas especies también son extraordinariamente dañinas para diferentes cultivos y bosques.

El principal reto tecnológico del proyecto es encontrar un “vehículo” eficaz para transportar esos dsRNA “silenciadores” de genes. Así, se probarán varios transportadores orgánicos, como liposomas artificiales y vesículas de membrana externa bacteriana, como posibles agentes de encapsulación que garanticen la durabilidad de los dsRNA en el campo, ya que el RNA se degrada con facilidad.

Los grupos de investigación de la UVa y CARTIF estudiarán y aplicarán estos transportadores y determinarán su potencial para controlar la infección de las plantas a través de las raíces o el sistema vascular, con el objetivo final de desarrollar un producto sostenible, eficaz y seguro para el manejo de enfermedades.

Evaluación del impacto ambiental

El proyecto dará un paso más con la evaluación agroecológica de los dsRNA. Así, el grupo investigador del IRNASA se encargará, finalmente, de determinar los efectos de los dsRNA en las poblaciones microbianas del suelo.

“En muchos estudios no se realizan este tipo de análisis, pero si el objetivo es llegar a comercializar el producto tiene que haber una evaluación del impacto ambiental. Queremos conocer esas implicaciones ecológicas desde el punto de vista microbiano. Si cuando se liberen los dsRNA van a tener una influencia en las poblaciones microbianas del suelo”, explica Ángel Valverde Portal, responsable del proyecto en el IRNASA-CSIC. “Las poblaciones de microorganismos del suelo cambian constantemente, el problema es que tras el uso de los dsRNA desaparezcan determinados microrganismos que realizan funciones importantes”, precisa.

Para realizar la evaluación del impacto ambiental se aplicarán enfoques bioquímicos y metagenómicos. Respecto al enfoque bioquímico, se medirán los perfiles de ácidos grasos característicos de determinados grupos microbianos para comprobar si hay un efecto y, en el caso de que lo haya, si es positivo, negativo o neutro.

En cuanto al enfoque metagenómico, permitirá realizar un estudio más detallado de los posibles cambios en las poblaciones microbianas. “Vamos a aplicar técnicas de secuenciación de última generación para investigar las poblaciones de bacterias, de hongos y de oomicetos. Esto nos permitirá ‘poner nombre’ a los microorganismos implicados”, agrega.

El proyecto ‘Sanidad vegetal sostenible mediante RNAi medioambiental para reducir el impacto de las enfermedades en la agricultura y los bosques (SUPERA)’/PLEC2021-008076, se inició a finales de 2021, tiene una duración de tres años y está dotado con cerca de 500.000 euros. Una firme apuesta por encontrar soluciones innovadoras y más sostenibles para controlar enfermedades de las plantas.

Un proyecto europeo del IRNASA-CSIC estudia hongos autóctonos para proteger la dehesa de plagas y enfermedades

  • LIFE MycoRestore busca el desarrollo económico rural a través de los recursos micológicos y las buenas prácticas forestales

El Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC) coordina el proyecto LIFE MycoRestore, que busca utilizar recursos micológicos y prácticas de manejo forestal para mejorar la salud de ecosistemas mediterráneos a la vez que trata de impulsar la economía local.

La iniciativa está dividida en tres grandes bloques. Micosilvicultura pretende establecer unas prácticas de manejo sostenible de micología y silvicultura para promover bosques resistentes a incendios y sequías. Micoeonomía trata de promover trabajos verdes para personas en riesgo de exclusión social, capacitándolos para reemplazar la producción de biomasa de bajo valor con trabajos de procesado de madera y producción de hongos innovadores de alto valor. En este bloque, se pretende también un enfoque de economía circular para las cadenas de suministro de producción de hongos y sustratos, estimulando las economías rurales. Finalmente, Micocontrol busca proporcionar una prueba de concepto sobre el uso de productos naturales de micocontrol y especies de hongos nativos para reducir la presencia de plagas o patógenos en los bosques.

“El objetivo general del proyecto es implementar prácticas tradicionales de silvicultura y prácticas micológicas innovadoras, para aumentar la resistencia de los bosques mediterráneos a las enfermedades y al estrés del cambio climático”, explica a DiCYT Álvaro Peix, investigador del IRNASA y coordinador del proyecto. Para lograrlo, se llevan a cabo plantaciones con árboles micorrizados e inoculaciones con hongos beneficiosos que pueden mejorar la salud de los ecosistemas forestales, haciendo que se enfrenten en mejores condiciones a adversidades como las sequías o el ataque de patógenos.

En particular, esta iniciativa está enfocada a la preservación de la dehesa, un ecosistema que “es único en términos de biodiversidad y en términos de economía rural sostenible, un motor económico importante para Salamanca y muchas zonas de España”, destaca el científico. Por ejemplo, para la enfermedad de La Seca aún no se ha encontrado una solución eficaz, porque “es muy compleja y se combina con otros factores de estrés como la sequía. Por eso es tan importante estudiar estas cuestiones, también relacionadas con el cambio climático”, apunta.

Una de las claves del proyecto es el uso de hongos como organismos de biocontrol, es decir, para que combatan a otros microorganismos causantes de enfermedades. Uno de los ejemplos más importantes es ‘Phytophthora’, un oomiceto causante de la enfermedad conocida como La Seca de la encina. El problema del chancro del castaño es diferente, ya que está causado por el hongo ‘Cryphonectria parasitica’, pero puede combatirse con cepas hipovirulentas de este hongo.

Hongos insecticidas

Los hongos también podrían servir como insecticidas, es decir, que tuvieran capacidad para proteger a los árboles de las plagas de insectos. “Los bosques de encinares y robledales se ven asolados por insectos del género ‘Cerambyx’”, comenta Peix. Lo mismo ocurre con la llamada culebrilla del alcornoque, ‘Coraebus undatus’, que tiene una gran importancia económica porque afecta a la producción de corcho.

En esa búsqueda de microorganismos que ayuden a proteger a los árboles y al ecosistema en su conjunto, hay una clara apuesta por los hongos autóctonos. “La legislación es muy restrictiva con el uso de organismos de fuera, así que el proyecto pivota sobre el aislamiento y el estudio de hongos autóctonos. Si se usan en los mismos lugares donde los encontramos de forma natural, no alteramos el ecosistema”, destaca el investigador del IRNASA. Además, al estar adaptados a ese entorno, se le supone una mayor efectividad. Algunos de los hongos que se están identificando pueden ser especies aún no catalogadas por la ciencia.

No obstante, el proyecto no solo incluye el estudio de los hongos, porque hay enfermedades cuya causa es muy compleja e involucra a diversos tipos de microorganismos, como la enfermedad de La Seca, que es una enfermedad polimicrobiana. “En mi laboratorio estudiamos microbioma bacteriano de la encina en relación con la enfermedad de La Seca. Hemos encontrado en parcelas de Salamanca algunas bacterias que ya han sido descritas en otras zonas de España y otros países como implicadas en esta patología, pero además comparamos encinas enfermas y sanas para explorar si hay otras nuevas implicadas”, señala Peix.

La dimensión económica
 En la parte de micoeconomía se buscan prácticas sostenibles en el marco de la economía circular y bioeconomía rural. “Cuando realizas estas prácticas en los bosques no solo mejoras la salud de estos ecosistemas y controlas las enfermedades, sino que generas unos beneficios ecosistémicos que ayudan a la economía local creando empleos verdes y aprovechando los productos que se generan”, comenta el experto. Por ejemplo, las talas controladas y selectivas mantienen a raya las enfermedades que afectan al arbolado y los incendios, pero esa madera también es un recurso que puede ofrecer un mayor rendimiento económico a los productores.

LIFE MycoRestore se está implementando a través de varias acciones de demostración. En España hay cuatro puntos en la provincia de Salamanca. En Valdelosa se realizan las prácticas sobre culebrilla del alcornoque; en Linares de Riofrío se trabaja el problema del chancro del castaño; en El Cubo de Don Sancho hay ensayos frente al insecto ‘Cerambyx’ que afecta al roble; y en La Alamedilla, en el Alto Águeda, se analiza cómo abordar La Seca de la encina. En Italia también hay experimentos relacionados con el chancro y la tinta del castaño, así como las podredumbres de la raíz de las coníferas. Además, en Cataluña y en Portugal se llevan a cabo acciones de micoeconomía.

Guía de buenas prácticas

El proyecto, que cuenta con otros socios nacionales como la Universidad de Valladolid y las empresas Mycelio, Volterra o IDForest, comenzó a mediados de 2019 y se prolongará hasta junio de 2023, así que aún queda por delante un año de trabajo, pero ya ha producido resultados tangibles, como una “Guía de buenas prácticas de identificación y control de algunas enfermedades comunes de los bosques mediterráneos” a disposición de cualquier productor o persona interesada (http://hdl.handle.net/10261/270412; DOI: 10.20350/digitalCSIC/14655).

Fuente: Agencia DiCYT (https://www.dicyt.com/noticias/un-proyecto-europeo-del-irnasa-estudia-hongos-autoctonos-para-proteger-la-dehesa-de-plagas-y-enfermedades)

LIFE. MycoRestore

El IRNASA-CSIC participa en una reunión con empresas en el marco de la Red ‘Aprendiendo de la naturaleza’

Entre el 18 y el 20 de mayo se ha reunido en la Residencia Lucas Olazábal de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) en Cercedilla (Madrid), la Red de Investigación ‘Aprendiendo de la naturaleza: interacciones multitróficas para la protección de cultivos y bosques’ (Ref. RED2018-102407-T), financiada por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, en la que participa activamente el IRNASA-CSIC.

En la jornada, patrocinada por ARTAL Smart Agriculture, los grupos de la Red y algunas empresas presentaron sus objetivos e intereses y se mantuvo una dinámica y enriquecedora mesa de discusión Ciencia-Empresa. En esta, se generó un importante sustrato de confianza y se puso sobre la mesa la necesidad de cooperación entre ambos sectores, fundamental para el desarrollo de la agricultura. La Red espera que se mantengan las colaboraciones generadas y se traduzcan en nuevos proyectos conjuntos entre la academia y la empresa.

Esta Red de Investigación está formada por 11 grupos de científicos españoles pertenecientes a distintas universidades y organismos públicos de investigación, además del IRNASA y la propia UPM, las universidades Politécnica de Cataluña, Jaime I de Castellón, Castilla-La Mancha y Valencia; centros de investigación del CSIC (EEZ, CIB, IHSM y MBG) y comunidades cutónomas (IVIA), con el fin último de profundizar en el conocimiento del complejo entramado de la interacción planta-fitófago a través de la acción coordinada entre los grupos.

La Red tiene un interés especial en la transferencia del conocimiento y la cooperación con el sector privado, por lo que en la jornada del día 19 de mayo se celebró una reunión conjunta con la plataforma tecnológica BIOVEGEN y empresas como ARTAL, TRADECORP, BIOMAR, DF BLUE AGRO, CLEAN BIOTEC, PROBELTE, KOPPERT, FERTINAGRO BIOTECH y AGRIFOOD INNOVATIONS.

El IRNASA-CSIC y el Ayuntamiento de Salamanca llevan la Ciencia de las plantas a las calles de la ciudad

  • La Plaza de la Libertad acogerá hoy y mañana la primera edición del ‘Mercado de Flores’, que incluye 8 puestos de venta, talleres divulgativos y una exposición de la Colección Mutis del Real Jardín Botánico
  • Más de 300 estudiantes de Primaria y Secundaria de la ciudad participará en los talleres de divulgación científica sobre plantas
  • La iniciativa ‘Salamanca Fascinación Verde’ se enmarca en el Día Internacional de la Fascinación por las Plantas e incluye además la actividad ‘Biotesoros Urbanos’

El alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, y la directora del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC), María del Mar Siles, acompañados por Jesús Garrote, representante de la titularidad del Centro P.I.F.P. Lorenzo Milani y Director General de la Casa Escuela Santiago Uno, han inaugurado esta mañana en la Plaza de la Libertad la primera edición de ‘Salamanca Fascinación Verde’, una iniciativa que se enmarca en la celebración, a nivel mundial, del Día Internacional de la Fascinación por las Plantas.

‘Salamanca Fascinación Verde’ incluye dos actividades principales: la I edición del ‘Mercado de Flores’, que tendrá lugar en la Plaza de la Libertad los días 19 y 20 de mayo en horario de mañana y tarde; y ‘Biotesoros Urbanos’, un recorrido por diferentes puntos del patrimonio verde de la ciudad en los que se recopilarán pistas para resolver un enigma. El Real Jardín Botánico de Madrid y el Centro P.I.F.P. Lorenzo Milani y Casa Escuela Santiago Uno colaboran también en esta primera edición.

Carlos García Carbayo destacó que esta iniciativa pone en valor la Estrategia de Infraestructura Verde, Savia, para contribuir a una Salamanca aún más saludable y con una mayor calidad de vida. Para lograr ese objetivo, el alcalde considera fundamental no solo una labor pedagógica sobre la importancia del cuidado y respeto por el medio ambiente, sino también un decidido apoyo a la labor investigadora con más oportunidades para la ciencia, la innovación y el conocimiento, y por tanto, con más oportunidades para el desarrollo y nuevos nichos de empleo. Prueba de ello es el Programa de Atracción del Talento del Ayuntamiento de Salamanca, una iniciativa pionera en España que tendrá continuidad con nuevas becas para investigadores, cuya convocatoria saldrá durante el último trimestre de este año.

Por su parte, Mar Siles ha recalcado que, con este evento, se busca sensibilizar a los ciudadanos sobre la importancia de proteger y conservar la biodiversidad vegetal en todos los ámbitos, incluido el urbano, “donde juega un papel fundamental para mantener un medio ambiente saludable y es precisamente un indicador de la calidad de vida en las ciudades”. La directora del IRNASA y delegada del CSIC en Castilla y León también ha incidido en la importancia de la colaboración entre instituciones para poner en marcha iniciativas como esta, con la que acercar a los salmantinos la Ciencia de las plantas y, en este sentido, el relevante papel que desempeña un centro de investigación ubicado en la ciudad, el IRNASA-CSIC, para avanzar hacia el desarrollo sostenible.

Más de 300 estudiantes salmantinos participantes

Tras la inauguración, las autoridades han visitado el ‘Mercado de Flores’, ubicado en la Plaza de la Libertad y abierto al público en horario de 10 a 14 horas durante la mañana y de 17 a 20 horas por la tarde, hoy jueves y mañana viernes 20 de mayo.

En el mercado, los visitantes podrán adquirir flores, frutas y hortalizas; visualizar las ilustraciones botánicas extractadas de la Colección de dibujos de la Real Expedición Botánica del Nuevo Reino de Granada, liderada por José Celestino Mutis (1783-1817) y cedida por el Real Jardín Botánico de Madrid para este evento; y participar en las diferentes sesiones de los ocho talleres divulgativos que serán impartidos por investigadores del IRNASA (acerca de ecosistemas y parásitos, la nutrición de las plantas, la reproducción vegetal y la relación entre los microorganismos presentes en el suelo y las plantas) y profesionales del Centro P.I.F.P. Lorenzo Milani y Casa Escuela Santiago Uno (sobre arte floral, la técnica japonesa kokedama, reconocimiento de especies vegetales y horticultura).

Más de 300 alumnos de Primaria y Secundaria salmantinos, así como personas con diversidad funcional procedentes de centros de educación especial, participarán en los talleres.

Próxima apertura de inscripciones a ‘Biotesoros Urbanos’

Asimismo, a partir de la próxima semana los centros escolares que lo deseen podrán inscribirse en la actividad ‘Biotesoros Urbanos’ a través de la página web de la Fundación Salamanca Ciudad de Cultura y Saberes. Esta actividad busca familiarizar a los escolares con el patrimonio verde urbano a través de un recorrido en el que deberán recopilar una serie de pistas con las que resolver un misterio: ¿Qué árbol ha quedado escondido en la Plaza Mayor desde que en 1954 se eliminasen los espacios verdes que la adornaban?

A lo largo de la ruta por 9 puntos de la ciudad los escolares conocerán curiosidades de algunos de los parques, paseos y parterres del centro histórico, así como de ejemplares de árboles y arbustos que la adornan. El recorrido se podrá realizar hasta el 20 de junio y premiará con un huerto urbano al centro escolar que complete el recorrido y resuelva el enigma en menos tiempo.

‘Salamanca Fascinación Verde’ se enmarca en el Proyecto “CLU-2019-05 – Unidad de Excelencia IRNASA-CSIC”, financiado por la Junta de Castilla y León y cofinanciado por la Unión Europea (FEDER “Europa impulsa nuestro crecimiento”).

Un investigador del IRNASA-CSIC participa en el descubrimiento de un nuevo hábitat de los líquenes

Este nuevo hábitat se ha descrito en el pavimento pedregoso del desierto del Namib (Namibia)

Los investigadores han hallado diferencias en la composición y estructura de las comunidades microbianas que habitan bajo rocas de la costa y del interior del desierto

El trabajo ha sido liderado por el Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN), también del CSIC

En los desiertos, las condiciones ambientales son tan extremas que la vida encuentra en las rocas a excelentes aliados para salir adelante. Es el caso de las comunidades de microorganismos y líquenes que habitan en el pavimento pedregoso del desierto del Namib (Namibia), cuya composición y estructura espacial ha sido analizada recientemente por un equipo de investigación internacional liderado por el Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN), y del que forma parte el Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA), ambos del CSIC.

Gracias a este trabajo, se ha podido conocer cómo se organizan los microorganismos que se localizan bajo pequeños fragmentos de cuarzo del pavimento pedregoso (lo que se denomina colonización hipolítica, que crece entre la roca y el suelo) y mostrar por primera vez la presencia de líquenes en estos mismos hábitats.

“Para este trabajo muestreamos dos zonas del desierto namibio, la costa, donde son frecuentes nieblas costeras matinales, y áreas interiores, más áridas, para determinar las diferencias que existen entre las comunidades microbianas localizadas bajo guijarros de cuarzo en ambos ambientes. La sorpresa fue que en las zonas costeras, detectamos líquenes en la interfase roca-suelo”, explica la investigadora del MNCN Asunción de los Ríos.

Los líquenes son organismos que surgen de la simbiosis entre un hongo y, al menos, un componente fotosintético (es decir, capaz de realizar la fotosíntesis), un alga y/o una cianobacteria. La organización y estructura que adquiere esta asociación les confiere protección frente a la desecación y la alta radiación solar, haciéndolos excepcionalmente resistentes a distintas condiciones ambientales adversas y capaces de formar parte de ambientes extremos de todo el planeta.

En los líquenes hipolíticos descritos en este trabajo, la estructura está modificada respecto a los que crecen sobre la roca. En los líquenes hipolíticos las algas necesitan menos protección por parte de los hongos porque el cuarzo bajo el que se esconden las protege de la radiación ultravioleta. Bajo la roca, además de estar protegidos, los líquenes pueden retener mejor la humedad que proviene de la niebla o el rocío, favoreciendo su actividad.

En el desierto del Namib muchas de las rocas de cuarzo semitransparente del pavimento están colonizadas por la parte que está en contacto con el suelo, formándose bajo ellas una patina verde. “Ya se sabía que, en las zonas del interior del desierto, estas comunidades hipolíticas estaban mayoritariamente dominadas por cianobacterias. Con este trabajo, uno de los objetivos era evaluar si esta colonización hipolítica tenía una organización espacial y composición similar en las zonas costeras, donde los líquenes colonizan la superficie de las rocas, y en las zonas muy áridas del interior del desierto. Los datos obtenidos nos han permitido confirmar que hay muchas diferencias estructurales, especialmente por el desarrollo de líquenes bajo las piedras en la zona costera”, expone la investigadora del MNCN.

Un nuevo lugar donde buscar formas de vida

“Hemos demostrado, además, que la colonización hipolítica no es una extensión de los líquenes que crecen en la superficie dorsal (epilíticos), sino que hay especies concretas que dominan cada uno de los hábitats”, apunta Isaac Garrido, también del MNCN. “La composición de las bacterias presentes en las comunidades hipolíticas de ambas localizaciones también difiere taxonómica y funcionalmente”, agrega el investigador del IRNASA Ángel Valverde.

La descripción de este nuevo hábitat para líquenes pone de manifiesto la gran capacidad de adaptación de los microorganismos y la importancia de la niebla y el rocío en la colonización de áreas desérticas. Se aumenta así el registro de posibles lugares donde buscar formas de vida en ambientes extremos terrestres o incluso en otros planetas o satélites, ya que, si en ellos hay o hubo vida, lo más probable es que fuera también escondida.

A la izquierda se muestra una roca colonizada por ‘Stellarangia namibiensis’ en su superficie (liquen epilítico). A la derecha se aprecia una roca con uno de los recientemente descubiertos líquenes hipolítico (que crece entre la roca y el suelo) en su base, junto a su imagen de microscopía electrónica de barrido/Asunción de los Ríos

Referencia

A. de los Ríos, I. Garrido‐Benavent, A. Limón, E.D. Cason, G. Maggs‐Kölling, D. Cowan y A. Valverde. (2022) Novel lichen‐dominated hypolithic communities in the Namib Desert. Microbial Ecology. DOI: https://doi.org/10.1007/s00248-021-01812-w

Fuente: MNCN

IRNASA-CSIC y el Ayuntamiento de Salamanca promueven una mayor concienciación ciudadana sobre los beneficios del estudio de la naturaleza con la I edición de ‘Salamanca: Fascinación Verde’

Con motivo del Día Internacional de la Fascinación por las Plantas se instalará un mercado de flores en la Plaza de la Libertad y se ofertarán actividades divulgativas para escolares y público general los días 19 y 20 de mayo

La directora del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC), Mª del Mar Siles, y la concejala de Medio Ambiente, Parques y Jardines, Miryam Rodríguez, han presentado hoy la I Edición de la iniciativa “Salamanca: Fascinación Verde”. Una propuesta enmarcada en las celebraciones del Día Internacional de la Fascinación por las Plantas, en la que se combinan actuaciones de divulgación científica para escolares y público general con un mercado de flores, entre otras actividades.

Tal y como ha explicado Mar Siles, con esta actividad el Centro pretende acercar a los ciudadanos el trabajo que desde hace más de 30 años desarrolla en Salamanca este centro del CSIC y que está directamente conectado con las inquietudes de nuestra sociedad actual. “Nos interesa que estudiantes y familias conozcan el impacto que nuestras investigaciones tienen en cuestiones como la seguridad alimentaria, la sostenibilidad de los ecosistemas o el cambio climático, pero también que valoren el importante patrimonio natural con el que cuenta Salamanca”.

Por su parte, Miryam Rodríguez explicó que esta iniciativa pretende promover una mayor concienciación ciudadana sobre los beneficios del estudio de la naturaleza, dentro de la Estrategia de Infraestructura Verde, Savia, para hacer de Salamanca una ciudad aún más saludable y con una mayor calidad de vida. “De esta forma, se plantan las semillas que germinen en la mente colectiva de los salmantinos para que interioricen que la investigación de las plantas también alberga una importancia fundamental para el futuro del medio ambiente y de la economía, y por tanto, del conjunto de la sociedad”, ha señalado.

Mercado de flores y talleres divulgativos

El programa de esta primera edición, en el que también colaboran entidades como el Real Jardín Botánico de Madrid o el Cpifp Lorenzo Milani y Casa Escuela Santiago Uno, concentrará la mayor parte de sus actividades los días 19 y 20 de mayo.

Entre las acciones propuestas destaca la I Edición del Mercado de Flores, que se ubicará en la Plaza de la Libertad y estará abierto al público en horario de 10:00 a 14:00 durante la mañana y de 17:00 a 20:00 por la tarde, ambos días.

El mercado contará con un total de ocho puestos de venta de flores, frutas y hortalizas en los que los visitantes podrán no sólo adquirir estos productos, sino también participar en actividades y talleres divulgativos a través de los que conocer mejor algunas especies vegetales, sus usos, su papel en la sostenibilidad de nuestro entorno, las amenazas que deben enfrentar y los últimos descubrimientos científicos para preservarlas o mejorar su aprovechamiento sostenible, entre otras cuestiones.

De forma preferente, estos talleres estarán dirigidos a los alumnos de Primaria y Secundaria de los centros educativos salmantinos que lo soliciten en horario de mañana y quedarán abiertos al público general en horario de tarde.

Los centros educativos podrán planificar su visita al Mercado de Flores a través de la web de la actividad o de la Fundación Salamanca Ciudad de Saberes.

Las  propuestas  divulgativas,  que  serán  coordinadas  por  los investigadores del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC), se complementarán con los talleres impartidos por profesores y alumnos del Cpifp Lorenzo Milani y Casa Escuela Santiago Uno sobre arte floral, cultivo y cuidado de bonsáis, reconocimiento de especies vegetales y horticultura.

Todas las actividades estarán abiertas al público general en horario de tarde. Quienes visiten el Mercado podrán disfrutar también de algunas de las ilustraciones botánicas extractadas de la Colección de dibujos elaborados durante la Real Expedición Botánica del Nuevo Reino de Granada, liderada por José Celestino Mutis entre (1783-1817). Las ilustraciones digitalizadas en alta resolución han sido cedidas por el Real Jardín Botánico de Madrid para este evento.

Biotesoros Urbanos

Dentro de las propuestas educativas incluidas en la I Edición de Salamanca Fascinación Verde se encuentra también la iniciativa “Biotesoros Urbanos”, que tiene como objetivo familiarizar a los escolares con el patrimonio verde urbano. Para ello, propone a los participantes un recorrido en el que deberán recopilar una serie de pistas con las que resolver un misterio: ¿Qué árbol ha quedó escondido en la Plaza Mayor desde que en 1954 se eliminasen los espacios verdes que la adornaban en que adornaban?

A lo largo del recorrido los escolares conocerán curiosidades históricas de algunos de los parques, paseos y parterres del centro de la ciudad, así como de algunos de los ejemplares de árboles, y arbustos que la adornan.

La propuesta se mantendrá abierta a la participación de los colegios hasta la segunda semana del mes de junio y premiará con un huerto urbano al centro escolar que complete el recorrido y responda a la pregunta en menos tiempo.

Con estas propuestas el IRNASA-CSIC y el Ayuntamiento de Salamanca se suman por primera vez de manera conjunta a las celebraciones del Día Internacional de la Fascinación por las Plantas. Una iniciativa que persigue concienciar a los ciudadanos sobre el importante papel que desempeñan estos seres vivos en la conservación presente y futura de nuestro planeta, así como de los múltiples beneficios que los seres humanos obtienen de su estudio, análisis y preservación.

De izda. a dcha. la directora del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC), Mª del Mar Siles, la concejala de Medio Ambiente, Parques y Jardines, Miryam Rodríguez, y la directora del Cpifp Lorenzo Milani y Casa Escuela Santiago Uno. Rocío González Sánchez, presentan la iniciativa ‘Salamanca Fascinación Verde’

Un proyecto europeo evalúa materias orgánicas para mejorar la salud de los suelos y mitigar el cambio climático

El IRNASA-CSIC coordina la parte española de una iniciativa que pretende recopilar datos de diversos países para mejorar la gestión de los suelos agrícolas

DICYT Varios centros españoles del CSIC, coordinados por el Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC), participan en un proyecto europeo que trata de evaluar el comportamiento de distintas materias orgánicas para mejorar la salud de los suelos dedicados a distintas prácticas agrícolas y mitigar el cambio climático. La iniciativa, que se denomina EOM4SOIL (External Organic Matter for Climate Mitigation and Soil Health), acaba de arrancar y tiene una duración de tres años.

El principal objetivo es mejorar las prácticas de gestión en el manejo de los suelos agrícolas, en particular, antes del procesamiento y en la aplicación de materias orgánicas que pueden ser muy variadas, desde lodos de depuradoras hasta compost vegetal. Con respecto al impacto que estas prácticas agrícolas tienen en el cambio climático, los investigadores evaluarán el balance neto del almacenamiento de carbono en el suelo y la emisión de gases de efecto invernadero, por ejemplo, en parcelas representativas de viñedos y cultivos herbáceos, a partir de las distintas materias orgánicas. En cuanto a la salud de los suelos, van a cuantificar los efectos de su aplicación a los suelos, incluida la posible contaminación.

“A veces los suelos agrícolas tienen contenidos de materia orgánica muy bajos, sobre todo en países del sur de Europa. Por eso, se enriquecen con enmiendas orgánicas para aumentar la fertilidad”, explica a DiCYT Sonia Rodríguez Cruz, investigadora del IRNASA responsable del proyecto en España. El trabajo que se va a desarrollar a lo largo del proyecto se centra en recoger datos de experimentos de larga duración que se están llevando a cabo en Europa al menos desde hace cinco años, aunque algunos superan los 20. Durante todo este tiempo han aplicado distintas materias orgánicas a distintos suelos y cultivos y ahora es el momento de recopilar toda la información disponible sobre la evolución de estos suelos. “En estos ensayos se recogen tanto parámetros físico-químicos del suelo como parámetros biológicos, por ejemplo, sobre la estructura de las comunidades microbianas del suelo. La idea es recopilar todo en una base de datos”, explica.

Este proyecto, que se enmarca del programa H2020-EJP SOIL, cuenta con 14 socios distintos distribuidos por varios países de Europa (Francia, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Italia, Suecia, Suiza, Lituania, Turquía, Austria y España) y está liderado por los científicos franceses del Instituto Nacional de Investigación en Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (INRAE). Por parte de España, participan cinco centros del CSIC. El IRNASA-CSIC aporta los datos de experimentos de larga duración que se han realizado durante años en la finca de Muñovela con compost vegetal y sustrato postcultivo de champiñón recompostado. “Hemos ido midiendo datos tanto físico-químicos como biológicos a lo largo del tiempo y comprobando que eran útiles tanto para suelos de viñedos, que son muy pobres en materia orgánica, como para suelos cultivados con cereales”, comenta la investigadora.

El Instituto de Ciencias de la Vid y del Vino (ICVV-CSIC) de La Rioja tiene datos similares de otros ensayos. Por su parte, el Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Sevilla (IRNAS-CSIC) cuenta con estudios que miden las emisiones de CO2 en relación a distintos tipos de materias orgánicas. El Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria de España (INIA-CSIC) se centra en los contaminantes orgánicos presentes en las enmiendas que se aplican a los suelos. Finalmente, el Centro de Edafología y Biología Aplicada del Segura (CEBAS-CSIC) de Murcia está al cargo de la base de datos de las enmiendas orgánicas.

Los resultados van a servir para realizar modelos con recomendaciones para los agricultores acerca de las materias orgánicas más adecuadas en cada tipo de suelo y para cada tipo de cultivo, teniendo en cuenta las dosis específicas y otros detalles y factores asociados. A esta información, que se extraerá de la puesta en común de los datos disponibles en toda Europa, habrá que añadir la que salga de otra parte experimental con materias orgánicas que se consideren novedosas. Para comprobar sus efectos, también se aplicarán al campo y se medirán diversos parámetros.

El tipo de materia orgánica que se aplica es diferente según los distintos países. En general, en España se utilizan materias orgánicas compostadas, como por ejemplo compost vegetal o compost de estiércol. En el norte de Europa es común la aplicación de biochar, un producto orgánico que procede de la pirólisis cuyo origen puede ser similar, pero que posteriormente ha pasado por ese proceso de combustión de la biomasa. La dosis y el tipo de compost que se puede aplicar en cada cultivo está regulado, pero este proyecto puede servir para mejorar las recomendaciones, teniendo en cuenta otras consideraciones, como la contaminación que puede conllevar aplicar un tipo u otro de enmienda, o la disponibilidad de cada materia orgánica en distintos países y localizaciones.

Parcelas de trigo de la Finca Muñovela tratadas con las enmiendas orgánicas, a vista de dron./IRNASA.

Fuente: Agencia DiCYT