Una Jornada impulsará el establecimiento de lazos comerciales entre empresas locales y británicas del sector agro

  • El IRNASA-CSIC, la Embajada Británica y la Diputación de Salamanca organizan en este evento, que se desarrollará este viernes en la Finca de Castro-Enríquez (Aldehuela de la Bóveda, Salamanca)

El Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC), en colaboración con la Embajada Británica y la Diputación Provincial de Salamanca, ha organizado este viernes, 7 de octubre, una Jornada Internacional de Colaboración en el Sector Agro. En el evento participarán varias empresas británicas ligadas al sector agrario con interés en establecer lazos comerciales con Castilla y León, en conocer cooperativas de productores y empresas locales, así como las capacidades de I+D+i presentes en la región.

El fin último del evento es facilitar el contacto y el intercambio entre las empresas y entidades británicas y las locales, con el objetivo de que este primer encuentro sirva de semilla para impulsar la cooperación y que en el futuro pueda llegar a establecerse una colaboración estable.

La Jornada se iniciará con la visita a la Finca Experimental Muñovela, una finca agropecuaria propiedad del IRNASA-CSIC que presta servicio a investigadores, empresas y otras entidades para realizar proyectos de I+D+i en campo en el ámbito de las ciencias agrarias y agroambientales. 

Tras esta visita los participantes se dirigirán a la Finca Castro-Enríquez de la Diputación de Salamanca, donde serán recibidos por Julián Barrera Prieto, diputado Provincial de Agricultura; Shona Brown, responsable de Comercio Exterior para el Sector Agro de la Embajada Británica en España, y Mar Siles Lucas, directora del IRNASA-CSIC. Allí conocerán ejemplos de colaboración público-privada en el sector agro así como las capacidades del IRNASA-CSIC: sus servicios científico-técnicos y sus proyectos para el desarrollo de variedades resistentes a sequías, la interacción planta-microorganismo y el control de plagas o la mejora del rendimiento en producción vegetal.

Posteriormente, tanto la Unión Regional de Cooperativas Agrarias de Castilla y León (URCACYL) como las empresas visitantes realizarán presentaciones sobre su actividad, para dar paso a un almuerzo de trabajo y a una serie de encuentros breves entre los distintos participantes. En estos encuentros breves, que serán concertados previamente, participarán las empresas británicas, el sector castellano y leonés (representado por una veintena de empresas que cubren los sectores hortícola, cerealista, olivarero, vitivinícola, apícola y de fertilizantes), investigadores del IRNASA-CSIC y profesionales británicas en materia de innovación y comercio exterior.

En concreto participarán en los encuentros, además de la propia Shona Brown, Elizabeth Wharham, responsable del área Agri-Tech en el Departamento de Comercio Internacional del Gobierno Británico; Pat Flyn, responsable del Área Comercial de la Asociación de Empresas Hortícolas del Reino Unido, y Miriam Pacho, Responsable de Innovación en el Sector Agro en el Departamento de Innovación del Gobierno Británico.

La Jornada, que será completamente gratuita, ha sido promovida por la Unidad de Excelencia del IRNASA-CSIC en el marco de su estrategia de transferencia de conocimiento. Esta actividad forma parte del proyecto “CLU-2019-05 – Unidad de Excelencia IRNASA-CSIC”, financiado por la Junta de Castilla y León y cofinanciado por la Unión Europea (FEDER “Europa impulsa nuestro crecimiento”).

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La presidenta del CSIC Eloísa del Pino visita el IRNASA

La presidenta del CSIC, Eloísa del Pino, acompañada por el vicepresidente de Organización y Relaciones Institucionales, Carlos Closa, ha visitado hoy el IRNASA-CSIC en el marco del viaje que ha realizado a Salamanca para firmar el protocolo general de actuación para la creación de la Casa de la Ciencia María la Brava, y para conocer los centros del CSIC en la ciudad.

En su visita al IRNASA ha sido recibida por los vicedirectores del Instituto, Rosa Morcuende e Iñigo Zabalgogeazcoa, junto con Mar Siles, directora y delegada institucional del CSIC en Castilla y León que la ha acompañado durante toda su estancia en Salamanca.

Después ha mantenido un encuentro con el personal del IRNASA en el Salón de actos, a quienes ha detallado los proyectos en los que está trabajando el nuevo equipo directivo del CSIC, como el plan TIC para aumentar la inversión en tecnologías de la información y de las comunicaciones, el plan Simplifica para avanzar hacia una mejor gestión administrativa, el nuevo plan para la transferencia de conocimiento o la mejora de los espacios e infraestructuras del CSIC. Finalmente, la presidenta del CSIC ha otorgado la palabra a los asistentes, con quienes ha intercambiado propuestas y trasladado aspectos de mejora.

Un hongo presente en una planta que habita acantilados tiene potencial para mejorar el crecimiento de cultivos

  • El Grupo de Interacción Planta-Microorganismo del IRNASA-CSIC determina que Diaporthe, un hongo que se encuentra en las raíces de ‘Festuca rubra’, mejora las condiciones de las plantas en un contexto de salinidad

El Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC) ha determinado que un hongo presente en las raíces de una planta que habita los acantilados marinos, Festuca rubra subsp. pruinosa, mejora el crecimiento y la tolerancia a la salinidad de dos especies vegetales de interés agronómico: el cereal tritordeum y la gramínea ray-grass inglés. La investigación se ha publicado en la revista científica ‘Frontiers in Plant Science’.

Festuca rubra subsp. pruinosa es una gramínea perenne adaptada a un fuerte estrés ambiental: habita acantilados rocosos marinos, donde el suelo y los nutrientes son muy limitados y la exposición a la salinidad es continua. Esto hace que sea un objeto de estudio muy interesante para la comunidad científica.

El Grupo de Interacción Planta-Microorganismo del IRNASA-CSIC profundiza en esta especie desde hace más de dos décadas. En concreto, centra su foco en los hongos endófitos –hongos que establecen relaciones simbióticas de mutualismo- que colonizan las raíces de Festuca rubra y que pueden tener un papel clave en la supervivencia de esta planta en un ambiente extremo.

Entre ellos se encuentra Diaporthe, un género de hongos conocido principalmente por sus especies fitopatógenas, pero que también engloba muchas especies con un estilo de vida endofítico que apenas han sido estudiadas. De hecho, en una investigación previa el equipo del IRNASA-CSIC encontró que las especies endófitas de Diaporthe son componentes principales del microbioma de las raíces de Festuca rubra, y que están presentes en alrededor del 50% de estas plantas.

“Pensamos que Diaporthe podía tener un papel importante en la tolerancia frente al estrés salino. Dado que la planta huésped es una gramínea silvestre, decidimos ver si Diaporthe se podía asociar a otras especies vegetales de interés agronómico y mejorar su rendimiento”, explica Beatriz Rodríguez Vázquez de Aldana, coordinadora del Grupo.

En la actualidad, el estrés salino es uno de los problemas más relevantes en la agricultura. Se estima que la salinidad de suelo impide el cultivo de aproximadamente 800 millones de hectáreas de tierra en todo el mundo. Un problema que puede ir en aumento ya que, además de la salinidad natural, la salinización del suelo puede deberse al uso de agua de riego en cultivos, “lo que hace que zonas que no eran salinas terminen convirtiéndose en ellas”, apunta la investigadora del IRNASA-CSIC.

Para determinar si Diaporthe puede mejorar las condiciones de las plantas en un contexto de salinidad, el equipo de investigadores ha aislado una cepa de las raíces de ‘Festuca rubra’ -la cepa EB4- y la ha inoculado en dos pastos agrícolas -el cereal tritordeum y la gramínea ray-grass inglés – en condiciones normales y en condiciones de estrés salino.

El experimento, realizado en el invernadero del IRNASA-CSIC, obtuvo unos resultados prometedores. La inoculación con Diaporthe promovió el crecimiento de ambas plantas, un 84 por ciento en el caso de tritordeum y 29 por ciento en el del ray-grass inglés. Los investigadores también determinaron las funciones fúngicas potencialmente relacionadas con esa promoción del crecimiento vegetal: la cepa de Diaporthe aumenta la disponibilidad y absorción de nutrientes y la producción de ácido indol 3-acético.

Con los resultados obtenidos en estos primeros experimentos, el equipo dará un paso más y trasladará los ensayos del invernadero al campo, en concreto a la Finca Experimental Muñovela, propiedad del IRNASA-CSIC. “El objetivo es que en el futuro pueda llegarse a una aplicación real en campo”, subraya Beatriz Rodríguez Vázquez de Aldana.

El trabajo se enmarca en el proyecto ENDOSYM (Comprendiendo el funcionamiento de la adaptación al estrés ambiental y promoción del crecimiento en plantas simbióticas con endófitos mutualistas Epichloë y Diaporthe) PID2019-109133RB-I00, financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación (MCIN/AEI/10.13039/501100011033) y FEDER “Una manera de hacer Europa”; y también cuenta con el soporte del Proyecto “CLU-2019-05- Unidad de Excelencia IRNASA-CSIC, cofinanciado por la Junta de Castilla y León y la Unión Europea (FEDER, “Europa impulsa nuestro crecimiento”).

‘Festuca rubra’ en un acantilado. Créditos: Iñigo Zabalgogeazcoa

El IRNASA-CSIC identifica una prometedora diana para generar vacunas frente a la garrapata ‘Ornithodoros moubata’

  • Se trata de las acuaporinas, unas proteínas que ejercen una función fundamental en la fisiología de las garrapatas
  • El estudio se ha centrado en ‘Ornithodoros moubata’, una especie de garrapata blanda distribuida por África Central, Meridional y Oriental que transmite la Peste Porcina Africana y la Fiebre recurrente humana
  • El equipo del IRNASA-CSIC ha diseñado un conjunto de 12 péptidos inmunogénicos para generar una vacuna capaz de bloquear las acuaporinas de esta garrapata

El Grupo de Investigación de Parasitosis de la ganadería y zoonosis parasitarias del IRNASA-CSIC ha identificado y caracterizado las acuaporinas de la especie Ornithodoros moubata como diana para generar una vacuna frente a esta garrapata, distribuida por África Central, Meridional y Oriental, que causa graves problemas a nivel ganadero y de salud humana. El trabajo se ha publicado en un número especial sobre garrapatas blandas de la prestigiosa revista ‘Pathogens’, del que los investigadores del IRNASA-CSIC Ana Oleaga y Ricardo Pérez Sánchez son editores invitados como referentes internacionales en este ámbito.

Ornithodoros moubata es una garrapata blanda transmisora de la Peste Porcina Africana (PPA), una enfermedad viral grave que afecta a los cerdos domésticos y silvestres y que constituye una seria amenaza para la ganadería porcina; y de la Fiebre recurrente humana (FRH), una enfermedad de etiología bacteriana, hiperendémica en los países de África oriental, como Tanzania, caracterizada por episodios repetitivos de fiebre en las personas y altas tasas de mortalidad perinatal.

Estas garrapatas viven en el interior de las madrigueras de sus hospedadores, que son principalmente los jabalíes verrucosos africanos (facocheros), pero también colonizan las viviendas humanas y los establos y se alimentan sobre las personas y los animales domésticos, principalmente los cerdos, a los que transmiten esas enfermedades.

“La presencia en el medio antrópico o doméstico de estas garrapatas dificulta enormemente la erradicación de la PPA y de la FRH en las zonas endémicas, incrementa el riesgo de reintroducción de la PPA en países de los que se erradicó ya, como España y Portugal, y favorece la endemización y la persistencia en los países que ha invadido más recientemente, como los caucásicos, Rusia, los países de Europa del Este, China o Vietnam, entre otros”, apunta el investigador del IRNASA-CSIC Ricardo Pérez Sánchez, primer autor del trabajo.

En la lucha contra las garrapatas, el método tradicionalmente empleado han sido los acaricidas químicos, pero estos productos presentan numerosos inconvenientes como el desarrollo de resistencias, la contaminación ambiental y su ineficacia frente a esta especie de Ornithodoros.

En este contexto el equipo del IRNASA-CSIC trabaja enfoques alternativos, como son el desarrollo de test diagnósticos y nuevas vacunas frente a estas garrapatas, que permitan localizar sus poblaciones, tenerlas vigiladas y eliminarlas si es posible, facilitando la prevención y el control de las enfermedades que transmiten.

Uno de los métodos alternativos más prometedores es el desarrollo de vacunas. “Estas vacunas están dirigidas a los hospedadores para generar en ellos una respuesta inmunitaria de anticuerpos frente a determinadas proteínas de las garrapatas que realizan funciones importantes. De esta forma, cuando la garrapata se alimenta del hospedador vacunado, junto con la sangre ingiere anticuerpos que neutralizan las funciones de la proteína diana y esto se traduce en daños significativos en la garrapata”, detalla Pérez Sánchez.

Las acuaporinas, unas dianas clave en las garrapatas

El trabajo recientemente publicado se centra en unas proteínas diana concretas, las acuaporinas. Estas proteínas se encargan de transportar agua a través de las membranas biológicas y ejercen un papel fundamental en diversos procesos fisiológicos vitales para la garrapata, incluyendo la alimentación de la misma.

“Cuando las garrapatas se alimentan ingieren cantidades enormes de sangre, hasta 200 veces su peso, que deben concentrar para poder digerir”, explica el investigador del IRNASA-CSIC. En esa concentración las garrapatas eliminan agua e iones y en ese proceso las acuaporinas tienen una función clave. “Las acuaporinas se expresan al menos en tres tejidos: el tubo digestivo, las glándulas salivales y las glándulas coxales, por lo que son dianas idóneas para vacunas, al ser fácilmente accesibles a los anticuerpos que se ingieren con la sangre del hospedador”, agrega.

El equipo del IRNASA-CSIC cuenta con datos del transcriptoma y del proteoma de las glándulas salivales y del intestino de Ornithodoros moubata obtenidos en proyectos previos. A través de data mining o minería de datos, identificaron más de 20 transcritos anotados como acuaporinas y seleccionaron siete que tenían marcos de lectura completos, es decir, que codificaban una acuaporina entera en O. moubata.

Tras amplificar, clonar y verificar por PCR que las secuencias obtenidas eran válidas, realizaron un análisis estructural y molecular con el objetivo de desarrollar modelos tridimensionales para determinar los dominios extracelulares, es decir, las partes de esas proteínas que están expuestas fuera de la célula, ya que es ahí donde los anticuerpos del hospedador pueden llegar más fácilmente.

Además, llevaron a cabo un análisis predictivo de la inmunogenicidad de las acuaporinas –su capacidad para generar respuestas inmunes-, en especial de esas partes extracelulares, y realizaron un análisis filogenético para caracterizar las siete identificadas. “Vimos que se agrupaban en cuatro clados. La homología de secuencia en cada clado era superior al 90 por ciento pero entre clados la homología era significativamente menor”, señala Pérez Sánchez. Todas ellas se expresaban en las glándulas salivales y en el intestino medio y solo tres en las glándulas coxales, unos órganos de excreción específicos de las garrapatas blandas.

Un conjunto de 12 péptidos inmunogénicos

Tras este estudio estructural, tridimensional e inmunogénico el equipo del IRNASA-CSIC concluyó que, para convertir las acuaporinas en dianas vacunales, lo más apropiado era diseñar péptidos inmunogénicos, péptidos capaces de generar anticuerpos específicos. Así, diseñaron un conjunto de 12 péptidos inmunogénicos para bloquear todas las acuaporinas identificadas.

“Si conseguimos boquear la función de todas las acuaporinas a la vez es muy probable que la vacuna ejerza un efecto protector intenso frente a esta garrapata. Si solo bloqueamos una o dos el efecto protector puede que se diluya, porque el resto de las acuaporinas quizás compensen la pérdida de función inducida por la vacuna”, precisa el investigador del IRNASA-CSIC, quien avanza que el próximo paso será un experimento de vacunación en conejos.

“Sinterizaremos estos péptidos y diseñaremos un experimento de vacunación para ver su eficacia real, para comprobar si inducen una respuesta de anticuerpos como hemos visto en el plano teórico. Una vez comprobado pondremos garrapatas en los animales inmunizados para ver el efecto de la vacuna sobre esas garrapatas”, añade.

También realizarán un estudio similar con otra garrapata blanda, Ornithodoros erraticus, sintetizarán nuevos péptidos y determinarán su protección frente a esta garrapata así como la protección cruzada que se pueda generar, lo que podría conducir a una vacuna de más amplio espectro.

Esta investigación ha sido financiada por el proyecto “RTI2018-098297-B-I00” (MCIU/AEI/FEDER, UE), subvencionado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER); así como por el proyecto “Unidad de Excelencia CLU-2019-05-IRNASA/CSIC”, concedido por la Junta de Castilla y León y cofinanciado por la Unión Europea (FEDER “Europa impulsa nuestro crecimiento”).

Referencia:

Pérez-Sánchez, R., Cano-Argüelles, A. L., González-Sánchez, M., & Oleaga, A. (2022). First Data on Ornithodoros moubata Aquaporins: Structural, Phylogenetic and Immunogenic Characterisation as Vaccine Targets. Pathogens11(6), 694. https://doi.org/10.3390/pathogens11060694

El IRNASA-CSIC ha realizado un estudio estructural, tridimensional e inmunogénico de las acuaporinas y ha concluido que, para convertir las acuaporinas en dianas vacunales, lo más apropiado es diseñar péptidos inmunogénicos.

Los profesionales del IRNASA-CSIC presentan más de una veintena de proyectos en desarrollo durante las I Jornadas de Excelencia Investigadora

Los días 15 y 16 de junio el Salón de Actos del IRNASA-CSIC acogió la celebración de las I Jornadas de Excelencia Investigadora, un foro de encuentro entre los profesionales del centro y puesta en común de los diferentes servicios científico-técnicos y proyectos en desarrollo actualmente.

En total, los profesionales del IRNASA-CSIC presentaron 22 proyectos y convenios en vigor sobre desarrollo sostenible de sistemas agroforestales y ganaderos, estrés abiótico, y procesos de degradación del medio ambiente y su recuperación; así como nueve servicios científico-técnicos (confocal, finca Muñovela, invernaderos y fitotrón, análisis e instrumentación, biblioteca, animalario y biología molecular), dos de ellos incipientes (colecciones y bioinformática y edición genética), que prestan servicio tanto a usuarios del propio centro como a usuarios externos (OPIs, universidades, empresas privadas, etc.).

La iniciativa, promovida por la Unidad de Excelencia del IRNASA-CSIC, tuvo como objetivo fomentar un mayor conocimiento entre los grupos de investigación del Instituto, mostrar su singularidad científica y técnica y promover el networking y la puesta en marcha de nuevas líneas de investigación y proyectos conjuntos.

En este sentido, la actividad contó con el apoyo del Instituto para la Competitividad Empresarial de Castilla y León (ICE) y la presencia de Elena Martín Espino, quien disertó con los asistentes sobre las oportunidades de financiación europeas de proyectos de I+D.

Las I Jornadas de Excelencia Investigadora se han organizado en el marco del proyecto “CLU-2019-05 Unidad de Excelencia IRNASA-CSIC”, financiado por la Junta de Castilla y León y cofinanciado por la Unión Europea (FEDER “Europa impulsa nuestro crecimiento”).

Logos de la Junta de Castilla y León y FEDER "Europa impulsa nuestro crecimiento"

El IRNASA-CSIC y el Ayuntamiento de Salamanca llevan la Ciencia de las plantas a las calles de la ciudad

  • La Plaza de la Libertad acogerá hoy y mañana la primera edición del ‘Mercado de Flores’, que incluye 8 puestos de venta, talleres divulgativos y una exposición de la Colección Mutis del Real Jardín Botánico
  • Más de 300 estudiantes de Primaria y Secundaria de la ciudad participará en los talleres de divulgación científica sobre plantas
  • La iniciativa ‘Salamanca Fascinación Verde’ se enmarca en el Día Internacional de la Fascinación por las Plantas e incluye además la actividad ‘Biotesoros Urbanos’

El alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, y la directora del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC), María del Mar Siles, acompañados por Jesús Garrote, representante de la titularidad del Centro P.I.F.P. Lorenzo Milani y Director General de la Casa Escuela Santiago Uno, han inaugurado esta mañana en la Plaza de la Libertad la primera edición de ‘Salamanca Fascinación Verde’, una iniciativa que se enmarca en la celebración, a nivel mundial, del Día Internacional de la Fascinación por las Plantas.

‘Salamanca Fascinación Verde’ incluye dos actividades principales: la I edición del ‘Mercado de Flores’, que tendrá lugar en la Plaza de la Libertad los días 19 y 20 de mayo en horario de mañana y tarde; y ‘Biotesoros Urbanos’, un recorrido por diferentes puntos del patrimonio verde de la ciudad en los que se recopilarán pistas para resolver un enigma. El Real Jardín Botánico de Madrid y el Centro P.I.F.P. Lorenzo Milani y Casa Escuela Santiago Uno colaboran también en esta primera edición.

Carlos García Carbayo destacó que esta iniciativa pone en valor la Estrategia de Infraestructura Verde, Savia, para contribuir a una Salamanca aún más saludable y con una mayor calidad de vida. Para lograr ese objetivo, el alcalde considera fundamental no solo una labor pedagógica sobre la importancia del cuidado y respeto por el medio ambiente, sino también un decidido apoyo a la labor investigadora con más oportunidades para la ciencia, la innovación y el conocimiento, y por tanto, con más oportunidades para el desarrollo y nuevos nichos de empleo. Prueba de ello es el Programa de Atracción del Talento del Ayuntamiento de Salamanca, una iniciativa pionera en España que tendrá continuidad con nuevas becas para investigadores, cuya convocatoria saldrá durante el último trimestre de este año.

Por su parte, Mar Siles ha recalcado que, con este evento, se busca sensibilizar a los ciudadanos sobre la importancia de proteger y conservar la biodiversidad vegetal en todos los ámbitos, incluido el urbano, “donde juega un papel fundamental para mantener un medio ambiente saludable y es precisamente un indicador de la calidad de vida en las ciudades”. La directora del IRNASA y delegada del CSIC en Castilla y León también ha incidido en la importancia de la colaboración entre instituciones para poner en marcha iniciativas como esta, con la que acercar a los salmantinos la Ciencia de las plantas y, en este sentido, el relevante papel que desempeña un centro de investigación ubicado en la ciudad, el IRNASA-CSIC, para avanzar hacia el desarrollo sostenible.

Más de 300 estudiantes salmantinos participantes

Tras la inauguración, las autoridades han visitado el ‘Mercado de Flores’, ubicado en la Plaza de la Libertad y abierto al público en horario de 10 a 14 horas durante la mañana y de 17 a 20 horas por la tarde, hoy jueves y mañana viernes 20 de mayo.

En el mercado, los visitantes podrán adquirir flores, frutas y hortalizas; visualizar las ilustraciones botánicas extractadas de la Colección de dibujos de la Real Expedición Botánica del Nuevo Reino de Granada, liderada por José Celestino Mutis (1783-1817) y cedida por el Real Jardín Botánico de Madrid para este evento; y participar en las diferentes sesiones de los ocho talleres divulgativos que serán impartidos por investigadores del IRNASA (acerca de ecosistemas y parásitos, la nutrición de las plantas, la reproducción vegetal y la relación entre los microorganismos presentes en el suelo y las plantas) y profesionales del Centro P.I.F.P. Lorenzo Milani y Casa Escuela Santiago Uno (sobre arte floral, la técnica japonesa kokedama, reconocimiento de especies vegetales y horticultura).

Más de 300 alumnos de Primaria y Secundaria salmantinos, así como personas con diversidad funcional procedentes de centros de educación especial, participarán en los talleres.

Próxima apertura de inscripciones a ‘Biotesoros Urbanos’

Asimismo, a partir de la próxima semana los centros escolares que lo deseen podrán inscribirse en la actividad ‘Biotesoros Urbanos’ a través de la página web de la Fundación Salamanca Ciudad de Cultura y Saberes. Esta actividad busca familiarizar a los escolares con el patrimonio verde urbano a través de un recorrido en el que deberán recopilar una serie de pistas con las que resolver un misterio: ¿Qué árbol ha quedado escondido en la Plaza Mayor desde que en 1954 se eliminasen los espacios verdes que la adornaban?

A lo largo de la ruta por 9 puntos de la ciudad los escolares conocerán curiosidades de algunos de los parques, paseos y parterres del centro histórico, así como de ejemplares de árboles y arbustos que la adornan. El recorrido se podrá realizar hasta el 20 de junio y premiará con un huerto urbano al centro escolar que complete el recorrido y resuelva el enigma en menos tiempo.

‘Salamanca Fascinación Verde’ se enmarca en el Proyecto “CLU-2019-05 – Unidad de Excelencia IRNASA-CSIC”, financiado por la Junta de Castilla y León y cofinanciado por la Unión Europea (FEDER “Europa impulsa nuestro crecimiento”).

IRNASA-CSIC y el Ayuntamiento de Salamanca promueven una mayor concienciación ciudadana sobre los beneficios del estudio de la naturaleza con la I edición de ‘Salamanca: Fascinación Verde’

Con motivo del Día Internacional de la Fascinación por las Plantas se instalará un mercado de flores en la Plaza de la Libertad y se ofertarán actividades divulgativas para escolares y público general los días 19 y 20 de mayo

La directora del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC), Mª del Mar Siles, y la concejala de Medio Ambiente, Parques y Jardines, Miryam Rodríguez, han presentado hoy la I Edición de la iniciativa “Salamanca: Fascinación Verde”. Una propuesta enmarcada en las celebraciones del Día Internacional de la Fascinación por las Plantas, en la que se combinan actuaciones de divulgación científica para escolares y público general con un mercado de flores, entre otras actividades.

Tal y como ha explicado Mar Siles, con esta actividad el Centro pretende acercar a los ciudadanos el trabajo que desde hace más de 30 años desarrolla en Salamanca este centro del CSIC y que está directamente conectado con las inquietudes de nuestra sociedad actual. “Nos interesa que estudiantes y familias conozcan el impacto que nuestras investigaciones tienen en cuestiones como la seguridad alimentaria, la sostenibilidad de los ecosistemas o el cambio climático, pero también que valoren el importante patrimonio natural con el que cuenta Salamanca”.

Por su parte, Miryam Rodríguez explicó que esta iniciativa pretende promover una mayor concienciación ciudadana sobre los beneficios del estudio de la naturaleza, dentro de la Estrategia de Infraestructura Verde, Savia, para hacer de Salamanca una ciudad aún más saludable y con una mayor calidad de vida. “De esta forma, se plantan las semillas que germinen en la mente colectiva de los salmantinos para que interioricen que la investigación de las plantas también alberga una importancia fundamental para el futuro del medio ambiente y de la economía, y por tanto, del conjunto de la sociedad”, ha señalado.

Mercado de flores y talleres divulgativos

El programa de esta primera edición, en el que también colaboran entidades como el Real Jardín Botánico de Madrid o el Cpifp Lorenzo Milani y Casa Escuela Santiago Uno, concentrará la mayor parte de sus actividades los días 19 y 20 de mayo.

Entre las acciones propuestas destaca la I Edición del Mercado de Flores, que se ubicará en la Plaza de la Libertad y estará abierto al público en horario de 10:00 a 14:00 durante la mañana y de 17:00 a 20:00 por la tarde, ambos días.

El mercado contará con un total de ocho puestos de venta de flores, frutas y hortalizas en los que los visitantes podrán no sólo adquirir estos productos, sino también participar en actividades y talleres divulgativos a través de los que conocer mejor algunas especies vegetales, sus usos, su papel en la sostenibilidad de nuestro entorno, las amenazas que deben enfrentar y los últimos descubrimientos científicos para preservarlas o mejorar su aprovechamiento sostenible, entre otras cuestiones.

De forma preferente, estos talleres estarán dirigidos a los alumnos de Primaria y Secundaria de los centros educativos salmantinos que lo soliciten en horario de mañana y quedarán abiertos al público general en horario de tarde.

Los centros educativos podrán planificar su visita al Mercado de Flores a través de la web de la actividad o de la Fundación Salamanca Ciudad de Saberes.

Las  propuestas  divulgativas,  que  serán  coordinadas  por  los investigadores del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC), se complementarán con los talleres impartidos por profesores y alumnos del Cpifp Lorenzo Milani y Casa Escuela Santiago Uno sobre arte floral, cultivo y cuidado de bonsáis, reconocimiento de especies vegetales y horticultura.

Todas las actividades estarán abiertas al público general en horario de tarde. Quienes visiten el Mercado podrán disfrutar también de algunas de las ilustraciones botánicas extractadas de la Colección de dibujos elaborados durante la Real Expedición Botánica del Nuevo Reino de Granada, liderada por José Celestino Mutis entre (1783-1817). Las ilustraciones digitalizadas en alta resolución han sido cedidas por el Real Jardín Botánico de Madrid para este evento.

Biotesoros Urbanos

Dentro de las propuestas educativas incluidas en la I Edición de Salamanca Fascinación Verde se encuentra también la iniciativa “Biotesoros Urbanos”, que tiene como objetivo familiarizar a los escolares con el patrimonio verde urbano. Para ello, propone a los participantes un recorrido en el que deberán recopilar una serie de pistas con las que resolver un misterio: ¿Qué árbol ha quedó escondido en la Plaza Mayor desde que en 1954 se eliminasen los espacios verdes que la adornaban en que adornaban?

A lo largo del recorrido los escolares conocerán curiosidades históricas de algunos de los parques, paseos y parterres del centro de la ciudad, así como de algunos de los ejemplares de árboles, y arbustos que la adornan.

La propuesta se mantendrá abierta a la participación de los colegios hasta la segunda semana del mes de junio y premiará con un huerto urbano al centro escolar que complete el recorrido y responda a la pregunta en menos tiempo.

Con estas propuestas el IRNASA-CSIC y el Ayuntamiento de Salamanca se suman por primera vez de manera conjunta a las celebraciones del Día Internacional de la Fascinación por las Plantas. Una iniciativa que persigue concienciar a los ciudadanos sobre el importante papel que desempeñan estos seres vivos en la conservación presente y futura de nuestro planeta, así como de los múltiples beneficios que los seres humanos obtienen de su estudio, análisis y preservación.

De izda. a dcha. la directora del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC), Mª del Mar Siles, la concejala de Medio Ambiente, Parques y Jardines, Miryam Rodríguez, y la directora del Cpifp Lorenzo Milani y Casa Escuela Santiago Uno. Rocío González Sánchez, presentan la iniciativa ‘Salamanca Fascinación Verde’

El CSIC y el Consejo Económico y Social de Castilla y León impulsan la transferencia de conocimiento en la comunidad

La delegada del CSIC participa en el programa de Audiencias Activas del CES (AUDACES) con la presentación ‘El CSIC como tractor del desarrollo socioeconómico en Castilla y León’

DICYT La Delegación Institucional del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en Castilla y León y el Consejo Económico y Social de Castilla y León (CESCYL) han firmado un convenio de colaboración para fomentar la transferencia de conocimiento desde el ámbito de la investigación al entorno socioeconómico. Este protocolo pone el énfasis en el aprovechamiento de las infraestructuras científicas y la difusión de la investigación a través de programas de formación, jornadas, estudios e informes por parte de las dos instituciones.

“Desde el Consejo Económico y Social queremos potenciar nuestra presencia y participación en el ámbito de la investigación y la creación de conocimiento, que es un rasgo diferencial de nuestra comunidad autónoma. Tenemos un importante nivel de investigación y creación de conocimiento y tenemos que avanzar en la transferencia de ese conocimiento al sector económico, a la creación de empleo estable y de calidad y a la mejor prestación de los servicios públicos y sociales”, explicó en la el presidente del CES, Enrique Cabero.

Por su parte, la delegada institucional del CSIC en Castilla y León, Mar Siles Lucas, participó en el programa de Audiencias Activas del CES (AUDACES), con la presentación ‘El CSIC como tractor del desarrollo socioeconómico en Castilla y León’. Según explicó, la firma del convenio con el CESCYL puede ser “un punto de inflexión” en la transferencia de conocimiento en la región, desde los laboratorios al mundo económico. En ese sentido, el trabajo de los investigadores del CSIC, que está focalizado en áreas como la biomedicina, la agricultura y el medio ambiente, se alinea con la Estrategia RIS3 de la Junta de Castilla y León.

Apoyo a las necesidades del sector primario

Posteriormente, la delegada del CSIC mantuvo una reunión con los consejeros del CESCYL que representan a las organizaciones profesionales agrarias (ASAJA, UPA-COAG y Unión de Campesinos de Castilla y León, UCCL). En este encuentro, los participantes plantearon que la investigación científica que llevan a cabo centros como el Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA, centro propio del CSIC) y el Instituto de Ganadería de Montaña (IGM, centro mixto del CSIC y la Universidad de León) contribuye a resolver problemas y abordar necesidades del sector primario, favoreciendo la innovación en el ámbito de la agricultura y la ganadería.

Siles, que también es directora del IRNASA, destacó los ensayos que se realizan en la Finca Experimental Muñovela de este centro de investigación, con proyectos nacionales e internacionales. Entre ellos, puso como ejemplo Ecopionet, una iniciativa pionera y muy aplicada de agricultura ecológica para apoyar a los productores que quieran cambiar de modelo. En cuanto a la investigación básica, “debe explotarse a través de una cadena de valorización de los resultados que den una salida a corto plazo a estos proyectos hacia el mundo económico”, afirmó. En esa conexión, el CESCYL puede ser un socio clave.

Fuente: Agencia DiCYT

“En Castilla y León tenemos los medios, el conocimiento y las infraestructuras para atraer talento científico”

Mar Siles, delegada institucional del CSIC en Castilla y León y directora del IRNASA, reflexiona sobre la necesidad de internacionalización de la ciencia y su imprescindible papel en la economía del futuro

DICYT – El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) es uno de los organismos públicos de investigación más importantes del mundo y su peso en la ciencia e incluso en la economía de Castilla y León es cada vez mayor. En los próximos años, los estudios científicos, la innovación y la transferencia de conocimiento van a ser claves para el desarrollo de áreas como la salud, la agricultura y el medio ambiente, sectores básicos para esta comunidad autónoma que, además, se corresponden con las áreas temáticas de los centros del CSIC.

En concreto, el CSIC cuenta con cinco centros en Castilla y León: el Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA) es el único centro propio, mientras que los otros cuatro son institutos mixtos compartidos con universidades. El Centro de Investigación del Cáncer (CIC) y el Instituto de Biología Funcional y Genómica (IBFG) pertenecen también a la Universidad de Salamanca; el Instituto de Biología y Genética Molecular (IBGM), a la Universidad de Valladolid; y el Instituto de Ganadería de Montaña (IGM), a la Universidad de León. A esto hay que añadir las sedes del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA) y del Instituto Geológico y Minero de España (IGME), organismos que se han incorporado al CSIC y que tienen representación en la comunidad.

Mar Siles Lucas, delegada institucional del CSIC en Castilla y León, es la encargada de coordinar todo este entramado que busca la excelencia en un momento transcendental. La salida de la pandemia y la llegada de los fondos europeos Next Generation EU suponen una oportunidad y un enorme desafío para un territorio amenazado por la despoblación. En ese contexto, la investigación científica debe ser uno de los pilares fundamentales que ayude a transformar la sociedad y la economía. En una entrevista concedida a DiCYT, Siles reflexiona sobre cuestiones como la internacionalización y la atracción de más talento científico en beneficio de toda la región.


PREGUNTA. ¿Qué objetivos tiene el CSIC en Castilla y León en este momento?


RESPUESTA. Este año se renueva el plan de actuación cuatrienal para todo el CSIC y en línea con ese nuevo plan, queremos reforzar nuestras principales actuaciones: la investigación, la transferencia, la internacionalización, la divulgación y la ciencia abierta, entre otras. Los delegados territoriales y los directores de centros hemos trabajado en conjunto sobre este nuevo plan del CSIC, a través de grupos de discusión para preparar este nuevo periodo de cuatro años, para guiar la elaboración de nuestros planes estratégicos. En nuestra Delegación queremos centrarnos este año en la parte de internacionalización.


P. Es de suponer que la clave estará en la financiación.

R. Los cuatros centros reconocidos como estructuras de investigación de excelencia acaban de conseguir las ayudas para el apoyo a la internacionalización de la Junta. Son las unidades de excelencia del IRNASA, el IBFG y el IBGM; y el Centro de Investigación del Cáncer, que es Centro de Excelencia. A esto hay que añadir que la financiación lograda a nivel nacional ha registrado una tendencia al alza muy fuerte, sobre todo en el último año, las convocatorias de 2020 que se resolvieron en 2021. Contando únicamente a los investigadores que pertenecen al CSIC en Castilla y León, nuestros ingresos se acercan a los cinco millones de euros, lo que nos posiciona cerca de lo que ingresan a este nivel cada una de las dos grandes universidades, Salamanca y Valladolid. En las convocatorias regionales, el ratio de éxito del CSIC también va al alza.


P. ¿Los centros están preparados para subir nuevos peldaños en la escalera de la excelencia?

R. El objetivo es recibir financiación de excelencia a nivel nacional. En el caso del Centro de Investigación del Cáncer, recibir la acreditación como Centro de Excelencia Severo Ochoa. En el caso de las otras tres unidades de excelencia, lograr el reconocimiento como Unidad de Excelencia María de Maeztu. Este año ha salido una convocatoria de ambas financiaciones nacionales y la voluntad de todos los centros que tienen la financiación regional es prepararse o presentarse a esta convocatoria. Estas convocatorias son muy competitivas, pero precisamente la ayuda extra para internacionalización a nivel regional nos refuerza para ser competitivos a nivel nacional.


P. ¿Y cuáles son las carencias?

R. Probablemente, nos faltan dos cosas principales. Como decía antes, una de ellas es la internacionalización. El éxito en la convocatoria de las estructuras de excelencia de la Junta nos ayuda mucho en ese camino. Otra cosa que nos falta, a pesar de que las estadísticas indican que somos muy potentes, es la atracción de talento. En este caso, no hablo solo de atracción de talento internacional, sino en general. Esta región se ha caracterizado por tener una potencia investigadora muy fuerte durante bastantes años y de forma sostenida, con la aportación del CSIC. Sin embargo, nos falta una estrategia fructífera para llegar a investigadores excelentes y explicarles que aquí van a encontrar el ambiente adecuado para desarrollar una carrera igual de competitiva que en Cataluña, Madrid o Andalucía. Es un mensaje que le tenemos que transmitir tanto a los que están en formación como a los senior, incluyendo a los que llevan años fuera de España y vean una oportunidad de volver. Tenemos que convencerles de que aquí tenemos medios, conocimiento, financiación e infraestructuras.


P. ¿Alguna idea para atraer ese talento?

R. Voy a poner el ejemplo del IRNASA, del que también soy directora. Gracias a que conseguimos ser Unidad de Excelencia, tenemos una estrategia definida, de abajo hacia arriba. El primer año, que fue el año pasado, lanzamos una convocatoria para contratos predoctorales e incorporamos a siete personas que ya han solicitado nuevas ayudas, como las FPU. En nuestro caso, hay un hueco entre esa parte, la más básica, y los investigadores senior. Las convocatorias Juan de la Cierva y Ramón y Cajal son las principales vías de atracción de talento a través de contratos públicos para rellenar este hueco, y el CSIC está intentando premiar a quienes las obtienen, ofreciendo ventajas concretas como incentivos a la investigación, espacios e infraestructuras, y posibilidades de una carrera ‘tenure track’ clara. Pero hay mucha competencia.


P. Pero el CSIC es la institución científica más potente de España…

R. Sí, el CSIC está en pleno auge de atracción de excelencia y tiene estructuras propias muy destacadas, como las Plataformas Temáticas Interdisciplinares o PTI. La más conocida es la de PTI Salud Global dedicada a COVID-19, con más de 200 investigadores de todas las disciplinas, entre los que me encuentro. Hay una interacción real y ese es un aspecto muy particular del CSIC, permite a los investigadores excelentes tener un entorno de trabajo más interesante y competitivo. Además, en estas PTI se está invirtiendo dinero de los fondos europeos Next Generation EU, así que en los próximos años atraerán a los mejores investigadores.


P. Precisamente, hay muchas expectativas con respecto a esos fondos de recuperación. ¿Van a cambiar la ciencia española?

R. Ya se están utilizando para las nuevas convocatorias y la nueva Ley de la Ciencia, que está en borrador, debe conllevar también una mayor inversión apoyándose en estos fondos. En Castilla y León tendremos muchas oportunidades. Por ejemplo, el Campus Agroambiental de Salamanca, donde se ubicará el IRNASA, puede salir beneficiado. Los investigadores tienen que ser lo más dinámicos que sea posible para obtener esos fondos. No deberíamos perder esta oportunidad, porque tenemos la fortaleza necesaria para solicitarlos y para ejecutarlos.


P. La “España vacía” de la que tanto se habla ahora, ¿puede progresar sin I+D+i?

R. Rotundamente no. Es clave en todos los sectores, desde la digitalización a la agricultura. En este ámbito, los fondos de recuperación van a propiciar un cambio mental y productivo, donde Castilla y León tiene ya un largo camino recorrido. La calidad de nuestros productos es indudable y somos la comunidad de extensivo por excelencia. Hay otras cuestiones importantes para el desarrollo económico, como el comercio exterior, que en principio no nos atañen como investigadores, pero lo cierto es que tiene que haber una conexión muy fuerte entre I+D+i y todos los aspectos económicos.


P. ¿Pero cree que la sociedad o las administraciones públicas son conscientes del papel que tiene el CSIC en la economía regional?

R. Nuestros institutos están muy relacionados con las consejerías de Educación, Economía, Agricultura y Sanidad. Sabemos que son conscientes del papel del CSIC y de que el retorno que obtenemos por cada investigador es muy elevado con respecto a otras instituciones. El CSIC tiene una gran importancia en los indicadores de I+D+i a nivel regional, y ahora todavía más, porque se han incorporado el IGME y el INIA. En general, nuestra fuerza es enorme dentro de la comunidad y espero que las autoridades sean conscientes, porque estamos trabajando dentro de todos los temas importantes de la RIS3, la Estrategia Regional de Investigación e Innovación para una Especialización Inteligente, y nuestra voluntad es apoyar al máximo el desarrollo futuro de nuestra comunidad autónoma.


P. ¿La relación con las empresas sigue siendo una asignatura pendiente?

R. La transferencia de conocimiento es muy importante, pero por las vías clásicas parece tener un recorrido muy corto. Estamos intentando idear nuevas estrategias para hacer que sea más dinámica. La Consejería de Educación está haciendo un esfuerzo a través de iniciativas como el programa T-CUE, pero creo que nosotros tenemos que proponer e implementar alternativas que sirvan de apoyo.

Un proyecto europeo estudia incrementar la diversidad de cultivos para luchar contra el cambio climático

El IRNASA analizará muestras de suelos sometidos a diferentes prácticas agrícolas para ver cómo influyen en la diversidad de hongos y bacterias, que a su vez contribuyen a capturar carbono

DICYT El Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA, centro propio del CSIC) participa en un nuevo proyecto europeo que se enmarca dentro del programa EJP SOIL, un consorcio que busca mejorar la gestión de los suelos agrícolas, de manera que contribuyan a resolver problemas como el cambio climático y la seguridad alimentaria. En concreto, la iniciativa que ahora se pone en marcha se encargará de estudiar el papel que puede tener la diversidad de cultivos durante los próximos cuatro años.

Prácticas como la rotación, con alternancia entre leguminosas y cereales, son habituales en el campo, pero los investigadores quieren probar también cuál es el efecto de otras propuestas, como la siembra de distintas especies vegetales en un mismo campo de cultivo. Con una mayor variedad, “los residuos orgánicos que se aportan al suelo serían más diversos y nuestra hipótesis es que esto repercutiría en el microbioma, en forma de una mayor diversidad de hongos y bacterias, y en la acumulación de carbono”, explica a DiCYT Ángel Valverde Portal, científico del IRNASA que participa en el proyecto.

El objetivo es que los suelos retengan carbono para que este disminuya en la atmósfera, de manera que se reduzca el efecto invernadero y, por lo tanto, la agricultura también contribuya a frenar el cambio climático. “La hipótesis fundamental con la que trabajamos es que la diversidad, tanto de materia orgánica como de los microorganismos que la acompañan, va a aumentar el secuestro del carbono”, apunta el científico. Si los cultivos son variados, habrá una mayor cantidad de microbios que degradan, precisamente, esa materia orgánica, contribuyendo a que el CO2 no se libere en la atmósfera, sino que quede almacenado en el suelo durante más tiempo.

Aunque todavía quedan muchos detalles por cerrar, los científicos trabajarán con cultivos habituales, como la avena, el trigo, la cebada o el maíz. La fertilización y el resto de las prácticas agrícolas serán las habituales, pero en lugar de sembrar una sola variedad de estos cultivos, “las semillas podrían estar compuestas de cuatro o cinco variedades de la misma especie”. Además de buscar esa mayor diversidad de la materia orgánica y de microorganismos, esta propuesta tiene otras implicaciones que pueden resultar beneficiosas para la rentabilidad del campo. “Cuando tienes una sola variedad, te la juegas a una carta, porque en función de sus características, la cosecha puede ser buena o mala un determinado año según las condiciones meteorológicas”, señala Valverde. En cambio, al trabajar con varias aumentan las opciones. “Quizá una de ellas ofrezca poco rendimiento si viene el año seco, pero otras más adaptadas a la sequía, aumentarían los beneficios”, comenta.

En otros casos, la propuesta es que en lugar de dejar una tierra en barbecho (una práctica agrícola tradicional que implica no sembrar para que el terreno se recupere), se podría optar por cultivos de cobertura, que ayudan a que no haya tanta erosión. De esta forma, a la hora de volver a sembrar el cultivo de interés agronómico, también habría aumentado la diversidad microbiana del suelo, ya que a los microorganismos les viene bien que haya mayor diversidad de plantas. Otra posibilidad es combinar diferentes tipos de cultivo dentro de una misma finca.

La labor del IRNASA será realizar el análisis de las muestras de suelos para determinar, precisamente, cuál es la diversidad de hongos y bacterias en cada caso. Otros socios del proyecto realizarán los ensayos en fincas experimentales, aunque aún está por decidir dónde, ya que en esta colaboración internacional participan un total de ocho países, liderados por Suecia. De esta forma, en los resultados entrarán en juego diversas variables, al margen del tipo de cultivo, como el clima y las características de los suelos. Por eso, “los análisis estadísticos también serán fundamentales”, comenta el experto del IRNASA, “crearemos distintos modelos matemáticos para modular la influencia de distintos factores en el resultado final”.

Aunque el objetivo del proyecto se ciñe al estudio de estos factores dentro de una agricultura tradicional, los científicos tienen en cuenta que aumentar la diversidad microbiana también redunda en una mejora de la producción, de forma que haría falta menos fertilizante convencional, un elemento contaminante de aguas y suelos que, además, contribuye a disminuir la diversidad de microorganismos. “La fertilidad del suelo está unida a la diversidad microbiana, pero hay que tener en cuenta que la actividad agrícola más común, con tractores y mucho movimiento de tierras, es mala por ejemplo para los hongos, porque el micelio que se extiende por el suelo en forma de grandes redes se rompe con mucho laboreo”, destaca el investigador. En ese sentido, la tendencia actual implica manipular menos el terreno, realizando una agricultura de precisión a la hora de sembrar, evitando arar en exceso o quemar rastrojos.

En líneas generales, la agricultura tiene un efecto negativo sobre el cambio climático, ya que un bosque captura más carbono que un suelo dedicado a la actividad agrícola. Sin embargo, hay otra vertiente muy importante: hacen falta más alimentos en el mundo. Por eso, es necesario lograr que la producción agricultura sea más respetuosa con el medio ambiente. “La agricultura tradicional ha sido muy buena para la alimentación humana, pero desde el punto de vista medioambiental ha causado daños y proyectos como este buscan soluciones”, comenta el científico del IRNASA.

El proyecto apenas está dando sus primeros pasos, ya que la primera reunión ‘online’ se celebrará la semana que viene. En el futuro, es probable que uno de los encuentros presenciales tenga lugar en Salamanca. El resultado final de los estudios se plasmará en un documento para aconsejar a los agricultores qué prácticas son mejores.

De izquierda a derecha, Cristina Frade Lago, Virginia Gascón Galán, Ángel Valverde Portal y José Mariano Igual Arroyo.